UBICACIÓN GEOGRÁFICA: Este centro milenario está ubicado en territorio boliviano, en el
Departamento de La Paz, Provincia Ingavi. Se encuentra enclavada en un valle de
11 Kilómetros de ancho, flanqueada por dos serranías paralelas que son
Kimsa-Chata al Sur, y Achuta al norte. Tanto el sitio arqueológico como el
actual poblado, se encuentra en pleno centro del valle.
Su altura con relación al nivel del mar es de 3.885 metros, y posee un clima frígido y algo ventoso, característico de esa región del altiplano. Limita al norte con Aygachi, por el este con Kollu-Kollu, por el sur con Jesús de machaca y por el oeste con Guaqui. La distancia de Tiwanacu a Viacha que es la capital de la provincia, es de unos 50 kilómetros, mientras que a La Paz, capital del departamento, son 72 kilómetros
Su altura con relación al nivel del mar es de 3.885 metros, y posee un clima frígido y algo ventoso, característico de esa región del altiplano. Limita al norte con Aygachi, por el este con Kollu-Kollu, por el sur con Jesús de machaca y por el oeste con Guaqui. La distancia de Tiwanacu a Viacha que es la capital de la provincia, es de unos 50 kilómetros, mientras que a La Paz, capital del departamento, son 72 kilómetros
ANTECEDENTES: Tiwanacu desvela un pasado esplendor
cultural mucho más antiguo que el imperio Inca, en unos parajes que soportan
temperaturas gélidas cuando soplan los vientos procedentes de las nevadas
cumbres que rodean al Titicaca.
La
zona del altiplano boliviano albergó a una de las tradiciones que aportaría las
semillas del primer fenómeno imperial en esta parte del continente. La Cultura
Tiwanacu (100 a.C. - 1200 d.C.), gracias a que ha dejado impresionantes
vestigios arqueológicos, ha sido uno de los fenómenos más mencionados por los
investigadores, pero se cuentan con pocas investigaciones clarificadoras a la
fecha.
En cuanto al nombre
con el que es conocido, lamentablemente lleva “prestado” del quechua. Sobre
este aspectos se ha dicho mucho y son diversos los autores que han intentado
entender su significado. Así tenemos al cronista de la Vega que en sus
“Comentarios Reales” nos dice que “tiwanaku” significa “siéntate guanacu” por
estar formada la palabra por dos de origen quechua, que son: tiai= siéntate y
Huanacu = Camélido del área andina. Estas palabras pronunciadas por el Inca
Mayta Kapac al chasqui enviado desde el Cuzco tras haber recorrido 109 leguas (545
km.) en menos en tres días. Para Vicente F. López, la palabra procede de dos
voces: tiía = tiya o tilla que significa luz, y huannuk = del verbo huañucu que
significa morir, lo que en consecuencia significaría “Luz Moribunda”. Una otra
interpretación la da José Rosendo Gutiérrez que también descompone en dos
palabras aymarás: tia=sustantivo que se traduce como borde, ribera y huañaco =
pasivo del verbo desecar. Componiendo ambas, Tendríamos “Borde desacado”. Por
su parte Rodolfo Falb, en la palabra Tiwanacu lee diez veces la palabra “agua”
y de ahí su traducción sería “agua y lluvia por todas partes”. Son todas estas
traducciones muy discutidas, puesto que sus autores tratan de asociar por una
parte, la proximidad del sitio al lago, y por otro se aprecia la asociación con
un evento como el Diluvio Bíblico.
Entre otras interpretaciones está la de Isaac Escobari que descompone en tres fases: thia-wanu-ak que significaría “El hombre de la costa seca”. A su vez, Miguel Taborga asocia la palabra Tiahuanaco con el idioma Maya y de allí dice que significaría “País sobre el agua de dios omnipotente”. Emeterio Villamil también nos da su punto de vista sobre el significado de Toahuanako indicando que proviene de ti que es una variación de tiende la China, teol de México y theos de los griegos, agregando las otras sílabas ti-wan-aca que significaría “Esto es de Dios”.
Entre otras interpretaciones está la de Isaac Escobari que descompone en tres fases: thia-wanu-ak que significaría “El hombre de la costa seca”. A su vez, Miguel Taborga asocia la palabra Tiahuanaco con el idioma Maya y de allí dice que significaría “País sobre el agua de dios omnipotente”. Emeterio Villamil también nos da su punto de vista sobre el significado de Toahuanako indicando que proviene de ti que es una variación de tiende la China, teol de México y theos de los griegos, agregando las otras sílabas ti-wan-aca que significaría “Esto es de Dios”.
Un otro investigador, Carlos Bravo nos da otra alternativa y nos
dice que ti es alternativamente Inti=sol, waman=hijos y hake=pueblo, lo que en
consecuencia sería “Pueblo de los Hijos del Sol”.
Para los aymarás dice el padre Olivera que el nombre verdadero era Chucara, mientras que el padre Cobo recogió de los aymarás el denominativo antiguo con el que conocían a Tiwanaku, indicándonos que era Taypicala, voz aymará que quiere decir “La piedra de en medio” porque “tenía por opinión los indios del Collao que este pueblo estaba en medio del mundo y que dé el salieron después del diluvio los que tomaron a poblar”.
Para los aymarás dice el padre Olivera que el nombre verdadero era Chucara, mientras que el padre Cobo recogió de los aymarás el denominativo antiguo con el que conocían a Tiwanaku, indicándonos que era Taypicala, voz aymará que quiere decir “La piedra de en medio” porque “tenía por opinión los indios del Collao que este pueblo estaba en medio del mundo y que dé el salieron después del diluvio los que tomaron a poblar”.
Desde su centro en el sitio Tiwanaku, irradió
su cultura a un área que pudo tener una extensión de 700.000 kilómetros
cuadrados. Se han identificados fases o períodos para explicar el desarrollo
alcanzado, que la ubicó entre las más desarrolladas en la antigua América del
Sur, las diversas temporalidades, denominaciónes y subdivisiones recibidas, nos
atrevemos a resumirlos en las siguientes:
Aldeano (inicios hasta el 100 d. C.)
Era una aldea como muchas más en la región
dominada culturalmente por las Wankarani, Chiripa y Pukara.
Urbano (hasta el 700)
El incremento de la agricultura generó
excedentes de producción, permitiendo el crecimiento de un centro urbano, el
mantenimiento de una clase dirigente y la realización de monumentales obras.
A partir del 300 d. C. era el centro
cultural, comercial y religioso de la región. Para el año 500 d. C., extendió
el fenómeno urbano a ciudades satélites, y comenzó a enviar colonos a ambos
lados de los Andes.
Expansivo o Imperial (hasta el siglo XII)
Su criterio Imperial estaba basado en
intereses económicos: aumentó la escala y complejidad colonizadora, controló la
red comercial circunlacustre del Titicaca, el altiplano y estableció enclaves
comerciales en zonas alejadas.
ORGANIZACIÓN SOCIAL: La cultura Tiahuanaco pasó por varios estadios de desarrollo.
En su primera fase formativa no existían clases sociales, porque
vivían en pequeñas comunidades con la actividad básica de subsistir.
Pasaron años de desarrollo para llegar a un complejo y completo
estado definido por la típica división de cualquier sociedad actual en clases
sociales, baja, media y alta compuesta por dignatarios, sacerdotes y guerreros,
especialistas, artesanos y constructores, y por último la clase productora
encargada del abastecimiento de alimentos.
Antonio Sagárnaga clasificó de la siguiente manera los estratos sociales:
a) Elite gobernante: clase dirigida y con poder
que planificó las grandes obras y
que al parecer se atribuyó origen divino.
b) Clase media: encargados de la realización
de las obras de ingeniería y de arquitectura, a esta clase también pertenecían
los artesanos.
c) Campesinado: toda la estructura del
estado descansaba en el trabajo de este sector social.
En cuanto al origen divino que se atribuía la clase gobernante,
Carlos Ponce Sanjinés manifiesta que la figura central de la Puerta del Sol, no
representa a ningún dios, y sí a algún líder divinizado, un “hombre-dios”.
ORGANIZACIÓN ECONOMICA: Desde su ubicación estratégica en la cuenca lacustre, donde
convergían rutas caravaneras, los dirigentes del Tiwanacu, pudieron controlar el
flujo de bienes que se producían en zonas de más baja altitud, como la coca o
el maíz.
Para afrontar el impacto del clima sobre la agricultura,
construyeron campos de cultivo elevados, conocidos como "camellones"
o "sukakollos", que evitaban las inundaciones y, a la vez, acumulaban
humedad, moderando los bruscos cambios de temperatura y brindando abundantes
cosechas. Su producción principal eran papa y mandioca.
Tuvieron especial importancia la domesticación de la llama y la
alpaca, de los que obtenían carne, lana, abono para combustible y un medio de
transporte de cargas. Este medio le permitió la integración de enormes redes
comerciales por medio de las cuales importaron materias primas como oro, estaño
y cobre.
El estilo Tiwanaku de cerámica presenta detalles simétricos, es
realista y con una combinación de los colores negro, ocre, rojo, blanco y gris.
El tipo más común de vasija es el "kero", decorado en uno de los
lados con una cara de formas aparentemente humanas, presentada en bajo relieve.
Otros ejemplos de la alfarería Tiwanaku son: botellones con cuello corto,
cántaros globulares con asas verticales, cántaros de doble recipiente con asa
puente, y vasijas en forma de aves y cabezas humanas. No se conocen vasijas
ornamentadas con frutas o plantas. Los diseños incluyen motivos geométricos con
círculos concéntricos. Entre las figuras antropomórficas, zoomórficas y
fitomórficas destaca el uso de la planta del maíz.
Es un gran desafío para cualquiera que desee encontrar respuestas
a la gran cantidad de preguntas que representa.
Las excavaciones, aún sin terminar, dejan ver parte de los muros
de lo que fue la gran pirámide de Akapana, un centro ceremonial de siete pisos
escalonados.
Desde la altura de esta ruina, al frente por el Norte, se puede
observar el imponente templo rectangular de Kalasasaya, una edificación de grandes
piedras y de dos hectáreas de extensión, con una construcción orientada para a
la observación del movimiento de los astros.
Otras de las ruinas que encontramos en esta zona son el Templete
Semisubterráneo, Putuni, Kantatallita, Kerikala, Lakakollu y Chunchukala.
No menos imponente y a algunos metros de todas estas ruinas, se
encuentra Puma Punku. Es una pirámide de gran dimensión, cuyas ruinas muestran
las grandes piedras utilizadas en su construcción y en las cuales podemos
observar el uso de grapas para su unión.
.
REFERENCIAS:
El Sistema Sociocultural en Tiwanaku,Dr. Carlos Ponce Sanjinés, Producciones CIMA, La Paz, Bolivia
El Sistema Sociocultural en Tiwanaku,Dr. Carlos Ponce Sanjinés, Producciones CIMA, La Paz, Bolivia
“EL mundo
Arqueológico del Crnl. Federico Diez de Medina”, Roy Querejazu Lewis – 1983 –
Los Amigos de Libro
PAGINAS WEB:
www.boliviaentusmanos.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario